Mingote

Hace una semana que comenté que me había levantado con la piel de la pierna izquierda dormida. Bueno, a día de hoy sigue así aunque la zona muerta ha disminuido.

He ido a mi médica de cabecera, que la han cambiado por otra más guapa, pero que no tiene un nombre tan bonito como la de la anterior: Helena Simpson. Y es que era inevitable mirarla y no pensar en el capítulo del esqueleto de ángel enterrado del centro comercial o en la canción "¿Quién quiere al Badulake?". Mi nueva médica se llama Susana Mingote... así, sin otra gracia más allá que de la de mezclar mina y lingote, osea sin ninguna gracia.

-Qué te pasa?
-El lunes me levanté con la piel de la pierna dormida, blablablá...
-Acuéstate en la camilla
-Antes invitame a una copa o algo, no?
-Es sólo para palparte, no te haré daño.
-Vale pero que quede claro que yo no soy de esos que a la primera... y nada de besos, que todavía no te quiero.
-Sientes si te toco aquí?
-Sí, pero poco, pasa algo malo?
-Y aquí?
-Igual, pasa algo malo?
-Sientes si te la apreto así?
Oh síiiiiiiii. (jadeo)
Puedes sentarte. tómate este antinflamatorio y esta pomada y si no se te quita en 10 días vuelve a verme.
Me llamarás?
NEXT!

Pues eso fue hace pocos días, mañana hará una semana que la piel de mi pierna decidió no despertarse más y tengo miedo. Adiós Juegos Olímpicos 2012